La Terapia Floral es un sistema alternativo que busca, mediante fórmulas florales, armonizar los estados que alteran el equilibrio psico-emocional del ser humano. Es una extraordinaria herramienta terapéutica que permite mejorar la calidad de vida de las personas.

El objetivo de esta terapia es promover la autoconciencia y la curación como un proceso activo, en que la persona no es un mero receptor pasivo como es en el caso de la medicina tradicional. Las flores trabajan los cuatro planos básicos del ser: espiritual, mental, emocional y físico, simultáneamente.

Pueden usarlos desde recién nacidos hasta ancianos, acompañando de cualquier otro tipo de tratamiento  o en forma unicista.

Ante enfermedades y trastornos graves no reemplazan un tratamiento médico, psicológico, psiquiátrico o neurológico, sino que sirven como complemento y apoyo.

Niveles de utilización:

Situaciones puntuales y transitorias.

Armoniza rasgos de personalidad.

Trata situaciones asociadas a la historia de vida.

Trata problemas tales como: estrés, cansancio, depresión, ansiedad, crisis de pánico, angustia, baja autoestima, baja motivación escolar, déficit atencional, hiperactividad, dificultades de adaptación y crisis vitales (duelos, separación y enfermedades graves).

Ventajas:

• Son de origen natural.
• Pueden ser tomadas por personas de todas las edades.
• Actúan a nivel holístico (cuerpo, alma, mente, emoción).
• Aplicaciones locales: Cremas, spray, gel.
• No son medicamentos.
• No tienen efectos secundarios ni contraindicaciones.
• No producen dependencia.
• Se utiliza en tratamientos con animales y plantas
• No interfieren en otras terapias.